La familia en Venezuela del fallecido expresidente Carlos Andrés Pérez manifestó este martes su “consternación” por la decisión de un juez estadounidense de postergar la fecha del juicio para determinar el lugar definitivo en que debe ser sepultado, tras ordenar su entierro temporal.
“El juez tomó esa decisión esta tarde y eso nos tiene muy consternados, no tanto por el hecho de enterrarlo temporalmente, porque podemos entender que esto sea necesario para continuar el juicio, pero no estamos de acuerdo con postergar la fecha del juicio”, dijo Carolina Pérez, hija del exmandatario.
Carlos Andrés Pérez falleció el 25 de diciembre pasado de un ataque cardíaco en Miami y desde entonces su cuerpo se mantiene en una funeraria mientras se dirime la disputa entre la familia de Pérez en Caracas y en Miami para determinar si es enterrado en Estados Unidos o en Venezuela.
“El juez, de nombre Arthur Rothenberg, dijo que el juicio que estaba pautado para el 21 de marzo debía ser pospuesto para mitad de año diciendo que la familia (de la compañera sentimental de Pérez, Cecilia) Matos no estaba preparada para el litigio”, dijo Carolina Pérez al referirse a los parientes del exmandatario en Miami.
En ese sentido el juez precisó que han surgido nuevos aspectos en el caso y por la naturaleza del litigio “se hace imperativo que el tribunal reconsidere tanto la fecha del juicio como el estatus del difunto”. Carolina Pérez aseguró que este miércoles sus abogados apelarán la decisión de postergar la fecha del juicio pues esperan poder llevar los restos del exmandatario a Venezuela lo más pronto posible.
“Queremos que sea enterrado en Venezuela, porque era su deseo, pero posponer esto por tanto tiempo no nos parece justo, vamos a apelar la fecha y lo que tengamos que hacer lo haremos”, reiteró la hija de Pérez. “¿Por qué la familia Matos hace esto?”, se preguntó.
El juez estadounidense dijo en su fallo que Pérez debe ser tratado con “honor y respeto” y la solución es enterrarle de una manera “digna y decente” en el condado de Miami-Dade, en el estado de Florida. La polémica sobre el cadáver del exmandatario surgió cuando Cecilia Matos, quien afirma que vivió con él más de 40 años, planeaba sepultarlo en Miami, pero la viuda, Blanca Rodríguez, quien nunca se divorció del expresidente, interpuso una demanda para evitarlo y reclamó el cadáver para trasladarlo a Venezuela.