MICHIGAN, 22 de agosto.- Un acróbata aéreo murió ayer luego de caer de una altura de más de 60 metros durante un espectáculo en la base Selfridge Air National, en Michigan.
En el aire, Todd Green intentaba pasar de un avión a un helicóptero cuando cayó al suelo.
“Todd había realizado esta prueba literalmente cientos de veces. En un espectáculo aéreo nos gusta decir que nada debe ser practicado en frente del público hasta que haya sido hecho mil veces en privado y sin accidentes”, comentó John Cudhay, presidente del Consejo Internacional de Espectáculos Aéreos.
Cudhay aseguró que de todas las acrobacias que existen en el negocio, ésta era una en la que se tienen menos probabilidades de ocurrir una catástrofe.
Tras caer, Green fue trasladado de inmediato al hospital Mount Clemens Regional Medical Center, pero nada se pudo hacer para salvarle la vida.
Green, con una carrera de 15 años en este tipo de espectáculos, era hijo de una leyenda de la acrobacia aérea, Eddie ‘El Adherible’ Green. Estaba casado y tenía dos hijos.