Washington, 30 oct (PL) Los Mets de Nueva York derrotaron hoy como locales 9-3 a los Reales de Kansas City para acercarse a un juego de sus rivales en la Serie Mundial del béisbol de las Grandes Ligas estadounidenses.
Ante un abarrotado City Field, más de 44 mil 800 personas, los anfitriones definieron el tercer juego del Clásico de Otoño en la parte baja de la tercera entrada y remataron con racimo de cuatro carreras en el cierre del sexto.
El jardinero Curtis Granderson conectó cuadrangular de línea por la pradera derecha con un compañero en circulación, el lanzador Noah Syndergaard, frente a los envíos de Yordano Ventura, cuando su equipo perdía 2-3 a la altura del tercer capítulo.
En el octavo, los anfitriones pisaron el plato cuatro veces gracias a impulsadas del dominicano Juan Uribe, dos del antesalista David Wright, ambos con sencillos, y del guardabosque cubano Yoenis Céspedes, con elevado de sacrificio.
Todo hacía pensar en un duelo de lanzadores entre el supersónico gigante Syndergaard, a quien apodan Thor (dios nórdico), y el también veloz Ventura, un nativo de Santa Bárbara de Samaná, en República Dominicana.
Sin embargo, el inicialista de los Reales, Eric Hosmer, empujó una en la misma primera entrada, y Wright replicó en la parte baja de la misma por los neoyorquinos con un estacazo de dos carreras.
En el segundo, Kansas City tomó el mando por última vez en el partido, mediante inatrapable impulsor del jardinero puertorriqueño Alex Ríos, quien después anotó por un lanzamiento desviado.
Syndergaard, un derecho tejano de 23 años y seis pies y seis pulgadas, no empezó bien, pero supo recuperarse con sus rectas de 97 y 98 millas por hora -llegó a 100 en el primer inning- hasta tirar seis entradas en las cuales permitió tres limpias y siete imparables, con seis ponches.
Por su parte, Ventura, de 24 años, no pudo pasar del cuarto capítulo y sus rectas de más de 95 millas fueron descifradas por la tanda de los Mets, quienes le marcaron cinco con siete cañonazos, incluyendo los cuadrangulares de Granderson y Wright.
Precisamente Granderson y Wright sobresalieron con el madero, el jardinero se fue de 5-2 con tres anotadas y dos remolques, mientras el veterano tercera base bateó de 5-2 con cuatro propulsadas.
Por los Reales ningún jugador pasó de un imparable.
En el Kauffman Stadium, los de Kansas City ganaron 5-4 el martes en un maratónico encuentro, de 14 entradas, y 7-1 al día siguiente, cuando no creyeron en el lanzador Jacob deGrom, hasta entonces invicto y único con tres victorias en la postemporada 2015 de la Gran Carpa.
Los fanáticos de los neoyorquinos esperan una remontada histórica, similar a la que protagonizaron en 1986 para superar a los Medias Rojas de Boston en siete juegos, después de caer en los dos primeros y llegar al sexto en desventaja.
Solo otros 10 equipos han ganado la Serie Mundial reponiéndose de un comienzo con dos reveses, desde que se jugara el primer Clásico de Otoño oficial, en 1903.
La actual final del béisbol estadounidense tiene un fuerte sabor latino, con 18 representantes de la región en las nóminas de los contendientes, cifra solo superada por la veintena inscrita en 2012, año que vio a los Gigantes de San Francisco barrer a los Tigres de Detroit.
El récord previo de presencia latinoamericana era de 16, en el Clásico de 2003, cuando los Marlins de Florida sorprendieron a los Yankees de Nueva York en seis choques, cantidad igualada después en tres ocasiones, un claro ejemplo del protagonismo de los jugadores de esa parte del mundo en las Grandes Ligas.
