Comando mata a 6 personas en bar de México, incluidos jefe narco y periodista

México (AFP) – Un grupo de hombres armados irrumpió la madrugada de este jueves en un bar del estado mexicano de Veracruz (este) y asesinó a seis personas que estaban reunidas allí, entre ellas un jefe local del cártel Los Zetas y un periodista, de acuerdo con el gobierno estatal.

“Fueron ejecutadas seis personas en un bar de Orizaba (Veracruz), entre ellos José Márquez Balderas alias ‘El Chichi’, identificado como jefe de plaza del grupo delincuencial autodenominado Los Zetas”, así como “el reportero Juan Heriberto Santos”, señaló el gobierno de Veracruz en un comunicado.

Veracruz es el estado mexicano más peligroso para la prensa, con una docena de homicidios de comunicadores desde 2010. Rubén Espinosa, un fotoperiodista asesinado junto a cuatro mujeres en Ciudad de México el 31 de julio, también había recibido amenazas durante su trabajo previo en Veracruz.
AFP / Gustavo Izús, arc

México

Sin embargo, tanto el gobierno de Veracruz como el diario para el que trabajaban dos periodistas que sobrevivieron a este asalto al bar La Taberna de Orizaba aseguran que en este caso no fue un ataque a la libertad de expresión.

El gobierno de Veracruz dijo que, según testigos, los seis fallecidos “se encontraban conviviendo” en el bar cuando cinco hombres con armas de alto poder irrumpieron en el local y les atacaron directamente.

En el bar habían “dos reporteros más sobre los que no atentaron y se encuentran bajo resguardo de la autoridad”, dijo el gobierno.

Según los reportes, los sicarios habrían abandonado el bar, donde suelen reunirse reporteros de la ciudad, pero enseguida regresaron y trataron de golpear con una botella a estos dos periodistas, hiriendo en la cabeza a uno de ellos.

Policías trataron de detener al comando en su huida pero no lo lograron y en el enfrentamiento hubo dos agentes lesionados, uno de ellos de gravedad.

– Sospechas sobre periodistas –

Los dos periodistas que sobrevivieron trabajaban desde un año atrás como responsables de temas policiales para el diario local El Buen Tono. El dueño del rotativo, José Abella, dijo a la AFP que está convencido de que ambos estaban coludidos con los criminales del bar La Taberna y que ya los ha despedido.

“Aquí no se trata de un ataque a la prensa veracruzana. Estos reporteros eran unos delincuentes, estaban tomando en la misma mesa con el jefe de plaza de Los Zetas y no creo que estuvieran hablando de periodismo. Estaban recibiendo dinero”, dijo Abella vía teléfonica.

“Ya he tenido que correr (despedir) a otros reporteros antes. Extorsionan a alcaldes, venden notas, son delincuentes con pluma”, denuncia.

Contactada por la AFP, la ONG internacional de defensa de los periodistas Article 19 señaló que están recabando datos sobre el asesinato del periodista Juan Heriberto Santos para determinar si pudo estar relacionado con su trabajo.

Según la información que ha recabado la ONG, Santos dejó de trabajar a principios de julio para la filial en Veracruz de la cadena Televisa -la mayor en lengua española- por recortes de personal.

Santos trabajaba como fotógrafo para su sitio eléctronico de noticias y también era experto en montañismo y ayudaba en la cadena para reportajes en zonas de difícil acceso, dijo la ONG.

Orizaba es una ciudad de 120.000 habitantes, a 270 km de Ciudad de México, emplazada en una región montañosa a más de 1.200 metros de altitud sobre el nivel del mar.

– Veracruz, punto caliente –

A orillas del Golfo de México, Veracruz es una importante región petrolera azotada en los últimos años por la violencia del crimen organizado y las pugnas entre cárteles del narcotráfico, especialmente entre Los Zetas y sus enemigos del Cártel del Golfo.

También se convirtió en la región más peligrosa para ejercer el periodismo desde que asumió en 2010 el gobernador Javier Duarte, del oficialista PRI (Partido Revolucionario Institucional).

Organizaciones como Reporteros Sin Fronteras han señalado a Duarte por generar un ambiente fuertemente hostil contra los periodistas en su estado, llegando a vincular a algunos de ellos con el crimen organizado y a hacerles advertencias.

“Pórtense bien”, les espetó Duarte en un acto público en junio pasado.

Sin embargo, no se conocen evidencias que impliquen directamente a Duarte en los crímenes contra periodistas.

El asesinato de Rubén Espinosa, el fotorreportero que huyó hace dos meses de Veracruz por amenazas, sacudió al país y volvió a desatar el temor en el gremio periodístico, además de poner de nuevo en la mira el clima de violencia en ese estado.

El martes, en una inusual medida, el propio gobernador rindió su declaración ante las autoridades de Ciudad de México por el caso Espinosa, del que se deslindó totalmente.

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