Houston (EE.UU.), 9 sep .- El mundo del fútbol americano vuelve enfocar sus reflectores en los campos de la Liga Nacional (NFL), ya que a partir de este jueves inicia el campeonato regular, y aunque los equipos mantendrán sus campos abiertos, la nube del coronavirus sigue ensombreciendo el panorama.
El jueves las miradas estarán puestas en uno de los duelos más interesantes de mariscales de campo, cuando abran el campeonato los actuales campeones defensores del Super Bowl, los Buccaners de Tampa Bay, con el experimentado y legendario Tom Brady, contra los Cowboys de Dallas, que tendrán a Dak Prescott.
El mariscal de campo de los Cowboys es toda una incógnita con su vuelta a la acción tras haberse pasado la mayoría de la pasada temporada de baja por una grave lesión de la rotura del tobillo de la pierna derecha al comienzo de la pasada temporada.
Durante el campo de entrenamiento también sufrió una lesión de hombro, pero el mariscal titular de los Cowboys declaró a los periodistas que está listo para iniciar las acciones como titular del equipo.
Brady, quien cumplió 44 años en agosto, y los Buccaneers, parten como favoritos para regresar al Super Bowl, especialmente porque los directivos han sido capaces de mantener el núcleo del equipo.
Si lo logra, Brady jugará su undécimo Super Bowl, en el que buscaría levantar el trofeo Vince Lombardi por octava ocasión en su increíble carrera.
En la Semana 4, Brady se enfrentará por primera vez a su exequipo los Patriots de Nueva Inglaterra, con el que pasó sus primeras 20 temporadas en la NFL y con el que ganó seis Super Bowls.
Ese juego, en Foxborough, esta previsto para imponer marcas de audiencia, si no es que se convierte en el partido de campaña regular más visto de la historia.
Mientras que Brady se presenta como uno de los más exitosos quarterbacks del campeonato, Prescott estará en el campo de juego jugar por primera vez desde que sufrió una terrible lesión de tobillo hace casi 11 meses.
Ha tenido poco tiempo de entrenamiento y nula actividad en juegos de pretemporada para ayudar en su recuperación.
Pero quiere estar frente a Brady y a los campeones del Super Bowl, los Buccaneers.
Prescott se recuperaba de su tobillo reparado dos veces mediante cirugías, cuando sufrió una distensión en el hombro derecho en los primeros días del campo de entrenamiento en California.
Sólo pudo hacer repeticiones mentales de las jugadas, antes de que le permitieran lanzar nuevamente la semana pasada.
Pero el Novato Ofensivo del Año en 2016 ya no tiene límites físicos, así que estará frente a Brady tratando de derrotarlo.
De esa manera iniciará el campeonato de la NFL, luego de que la campaña pasada estuviese condicionada por la pandemia que marcó la temporada y dejó los estadios vacíos.
Sólo aproximadamente un millón de aficionados asistieron a alguno de los 256 partidos de la NFL en 2020, un promedio de 3.922 por encuentro.
A diferencia de la temporada del 2019, antes de la pandemia, cuando cinco equipos tuvieron más de un millón de aficionados durante todos sus partidos. Dallas fue líder de la liga con 1.201.599, incluidos 667.377 en casa.
Ahora, más del 90 por ciento de los jugadores de la liga tienen al menos una dosis de la vacuna contra la covid-19, así que se esperan pocas (quizá ninguna) modificaciones en el calendario, algo que fue una constante el año pasado con los equipos que presentaron brotes de coronavirus.
Por primera vez, se jugará un calendario de 18 semanas y 17 partidos de temporada regular por equipo.
La Semana 18 se jugará el sábado 8 y domingo 9 de enero; una semana más tarde se llevarán a cabo los juegos de comodín y así comenzará el camino al Super Bowl LVI, programado para el 13 de febrero de 2021 en el SoFi Stadium de Los Ángeles.
Mientras que el mundo de las apuestas legales verán en el inicio de la NFL su marcha hacia un gran negocio de una industria que generará millones de dólares de ingresos y puestos de trabajo.
Se espera que los jugadores en 26 estados más el Distrito de Columbia puedan apostar legalmente, según la Asociación Estadounidense de Juegos, con hasta cinco estados adicionales ofreciendo tales apuestas antes de que termine la temporada, en febrero del 2022, con el Super Bowl.
Eso es más de 18 estados con apuestas deportivas legales al comienzo de la temporada de fútbol del año pasado. Y algunos de los mercados más grandes de los Estados Unidos, incluidos California y Florida, se están moviendo hacia la legalización, y Nueva York planea adoptar las apuestas deportivas móviles en algún momento.
El crecimiento explosivo de la industria se produce a medida que más y más empresas se unen a la competencia, lo que hace que sea más difícil ganar y mantener participación de mercado y ganancias.
Además de empeorar las cosas para algunas personas con problemas de juego, ya que la industria está ideando nuevas formas de apostar en los deportes, incluidas las microapuestas en vivo sobre el resultado de cosas como la próxima posesión en un partido de fútbol. (EFE) MiCiudad TV