Buenos Aires, 29 Ene.- Una jornada de protesta se vivió hoy en Buenos Aires ante los despidos masivos impulsados por el presidente Mauricio Macri, que ya dejaron en la calle a más de 25 mil trabajadores del Estado.
Trabajadores del Ministerio de Cultura encabezaron una de las primeras marchas, luego que este viernes por la mañana casi 500 se enteraron de que estaban despedidos cuando se les impidió el ingreso a la dependencia, sin ningún aviso previo.
Lo mismo ocurrió en la presidencial Casa Rosada, donde 50 trabajadores llegaron como todos los días a cumplir con sus funciones, pero ni siquiera se les permitió la entrada.
Desde que Macri asumió el pasado 10 de diciembre han sido despedidos trabajadores de los ministerios de Planificación, Desarrollo Social, Interior, Trabajo, Justicia, Agricultura y Seguridad, Jefatura de Gabinete, Banco Central, Casa Rosada, Cámara de Diputados, Senado y el Centro Cultural Kirchner.
También hubo despedidos en múltiples municipios y provincias del país, en Fabricaciones Militares, Vialidad Nacional, Argentina Satelital, Correo, Aerolíneas Argentinas y la Secretaría de Comercio.
Asimismo, se prevé que la cifra se incrementará debido a que la política de reducir las nóminas continuará en las próximas semanas.
El gobierno anticipó que echaría a los “ñoquis”, como se denomina en Argentina a las personas que cobran salarios del Estado sin trabajar, y a los militantes kirchneristas, es decir, a quienes apoyaron a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Sin embargo, los despidos han sido humillantes, ya que ninguna autoridad habló previamente con trabajadores que simplemente son incorporados en “listas negras” sin que se les expliquen las razones concretas de la cancelación de sus contratos.
Entre los despedidos hay, incluso, simpatizantes del macrismo que criticaban al kirchnerismo y que apostaron por un cambio que ahora les costó sus puestos de trabajo.
También hay profesionales de todo tipo, con años de antigüedad, que de un día para el otro se encontraron en la calle y, además, con el desprestigio de ser calificados como “ñoquis”, pese a que iban a trabajar todos los días y cumplían horarios y funciones específicas.
Por ello, entre las protestas de este viernes destacó la realizada frente al Congreso, donde trabajadores despedidos prepararon y sirvieron los ñoquis (un tipo de pasta italiana elaborada con papas) que tradicionalmente se comen en este país el 29 de cada mes.
La metáfora de los “ñoquis haciendo ñoquis” intentó visibilizar una política del gobierno de Macri que contrasta con su propuesta de “pobreza cero”, porque no hay manera posible de lograr esa meta si aumenta el desempleo. (Notimex)