(StatePoint) Como padre, probablemente está siguiendo cada movimiento que hace su hijo pequeño, prestando especial atención a los hitos del desarrollo, como sentarse, ponerse de pie y hablar.
“Aunque el ritmo de desarrollo varía de un niño a otro, los padres deben prestar atención cuando las cosas parecen ir mal. A veces, la causa de un retraso es un problema médico, y en muchos casos, la intervención temprana es importante”, dice el Dr. Garey H. Noritz, pediatra que cuida a niños con discapacidades y que fue autor de un informe clínico sobre retrasos motores para la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP). “Usted es el mejor experto en su hijo, de modo que si tiene alguna inquietud, debe abordarla con su pediatra”.
El Dr. Noritz ofrece el siguiente consejo para los padres de niños pequeños que tienen inquietudes sobre el desarrollo intelectual o físico de sus hijos:
• Haga una cita: No espere hasta su próxima cita programada para hablar con su pediatra acerca de sus preocupaciones. Haga una cita tan pronto como sea posible.
• Utilice los recursos gratuitos: Los recursos en línea pueden ayudar a los padres a prepararse para la consulta con su pediatra. Una de estas herramientas, “Retrasos en el desarrollo físico: a qué estar atentos”, una lista de comprobación en línea de la AAP disponible en healthychildren.org/motodelay.es, es un buen recurso para los padres y cuidadores de niños menores de 5 años. Disponible en inglés y español, la herramienta interactiva está diseñada para mejorar la identificación temprana y la atención del retraso del desarrollo motor. A través de una orientación en pantalla, los padres pueden identificar temas para comentarlos con el pediatra de su hijo.
• Solicitar pruebas genéticas cuando se confirme un problema del desarrollo: Cuando se trata de retrasos y discapacidades intelectuales, tener un diagnóstico correcto por parte de un profesional médico ayuda a las familias a obtener el apoyo y la información que necesitan a fin de administrar la atención a la salud de su hijo y ayudarle a alcanzar su máximo potencial. Los pediatras pueden desempeñar un papel fundamental al trabajar con los padres con objeto de identificar los retrasos intelectuales.
Una de las causas heredadas más comunes de la discapacidad intelectual, el síndrome de X frágil (FXS), sólo puede confirmarse con la Prueba de ADN FMR1 para X frágil (en inglés).
“Todos los niños con retrasos en el desarrollo, discapacidad intelectual o trastorno del espectro autista deben ser tenidos en consideración para una evaluación genética”, dice el Dr. Robert A. Saul, pediatra y genetista médico, miembro de la AAP. “Aunque las intervenciones terapéuticas son de vital importancia, una evaluación genética diagnóstica también lo es. Aunque no hay cura para el FXS, con un diagnóstico podemos ofrecer tratamientos de apoyo importantes y abordar enfoques educativos y terapéuticos. Tener un motivo para las discapacidades intelectuales y los problemas conductuales de un niño puede ser tranquilizador para las familias, y un diagnóstico les permite recibir asesoría para la planificación familiar, la participación en investigaciones clínicas si lo desean, y la conexión con grupos de apoyo”.
Se pueden encontrar más consejos, herramientas, recursos confiables e información sobre el desarrollo infantil y otros problemas pediátricos para las familias en healthychildren.org/es. Hay información sobre el FXS para médicos y otros proveedores de atención a la salud en www.aap.org/fxs (en inglés).
Recuerde, hay muchas maneras en que puede ser proactivo sobre el desarrollo motor e intelectual tempranos de su hijo. Si tiene alguna preocupación, busque herramientas, recursos y el consejo de su pediatra lo antes posible.