CIUDAD DE MÉXICO, 22 de julio.- Parece que viven en un cuento de hadas: son jóvenes, ricas y deseadas por millones de hombres alrededor del mundo.
Ellas son las mujeres Kardashian, quienes desde 2007 llegaron a la pantalla chica con Kepping Up With The Kardashians.
Con cinco temporadas al aire del reality show de E!, y tres spin off es que las originarias de Los Ángeles, California, han ido ganando seguidores por todo el mundo.
De acuerdo con Kris Jenner, la matriarca del clan Kardashian, todo el éxito y popularidad que gozan se debe al trabajo duro, no sólo a los escándalos en los que las chicas han estado involucradas, como el video sexual entre el rapero Ray J y Kim, o el rápido matrimonio entre Khloé y el basquetbolista de los Lakers, Lamar Odom.
“Ellas trabajan muy duro en todo lo que hacen, no hacemos un típico show de televisión, porque no se muestran las 18 horas al día que todas trabajamos. Por eso creo que es bueno todo lo que enseñamos a la gente, cómo las citas de nuestras empresas de ropa. La grabación de los reality shows, es extenuante.
“Pero creo que son muchas y diversas cosas las que ellas hacen, no se detienen ante nada y no lo hacen por estar en la pantalla chica. Considero que es sorprendente lo que realizan, porque trabajan mucho y con mucha pasión y energía. Creo que son todas esas cosas las que las han mantenido dentro de este negocio”, comentó en entrevista telefónica Kris Jenner, madre y representante de las jóvenes.
Más allá de la belleza que tienen sus hijas a los ojos de otras personas, para Kris lo más importante es que son mujeres con una propuesta.
“Creo que son sexys y guapas, porque se cuidan, pero siempre están preocupadas por proponer algo nuevo, siempre están con una gran energía, y eso puede ser considerado sexy. Viendo en el pasado, tuvieron sus problemas con sus cuerpos y sus atuendos y por eso decidieron crear su propia línea de ropa, que ahora sean consideradas sexys es porque tienen confianza en sí mismas”, afirmó.
El inicio
Antes de que esta familia tomara por asalto a Los Ángeles, Miami y Nueva York, ya tenía notoriedad gracias al patriarca del clan, Robert Kardashian (Q.E.P.D), un abogado especialista en la industria musical, quien fue uno de los representantes legales de O. J. Simpson en el juicio penal en el que el deportista fue acusado de asesinar a su ex mujer.
Robert falleció en 2003, pero antes de irse les legó a sus cuatro hijos, Kourtney, Kim, Khloé y Robert, muchos millones y la idea de que de la fama se pueden sacar buenos dividendos. Por ello, las chicas pusieron manos a la obra y en 2010 facturaron 65 millones de dólares, entre la realización de sus programas y el éxito de D-A-S-H, la franquicia de tiendas que vende la línea de ropa que diseñan.
“Creo que es increíble que mis hijas puedan ser un modelo o inspiración. No se trata sólo de glamour o estilo que manejan, sino ver que otras chicas como mis hijas tengan aspiraciones, o se acerquen a la moda, sepan que para lucir igual a ellas no se trata únicamente de que sean bonitas o no, sino que estén apasionadas por todos los aspectos de su vida, que creen su propio estilo, que tengan un look diferente, que sean originales. Mis hijas diseñan toda su ropa, lo que usan, trabajan mucho en ello”, agregó la también empresaria.
En 2003, Kris y su hija mayor, Kourtney Kardashian, abrieron la tienda de ropa para niños Smooch, con la cual siguieron hasta 2009, cuando la cerraron tras el nacimiento del primer nieto de Jenner.
Pero ella no dejó de trabajar y ahora, además de ser la representante de la familia, también administra los negocios de las chicas.
Junto a Bruce Jenner, su actual esposo, comanda la empresa Jenner Communications Inc.; también es productora de los realities Keeping Up With The Kardashians y Khloe & Lamar, que pasa por E!, los jueves a las 22:30 horas.
“No es presión para ellas lo que he conseguido a lo largo de mi vida. Siento que ven en mí un ejemplo de alguien que luchó por lo que quiso y que trata de ser una profesional y perfeccionista. Quizá hayamos tenido un modo de vida medio loco, pero lo ven como una inspiración de que pueden hacerlo e intentar lo que quieran, no sólo en los negocios, sino en cualquier aspecto de su vida”, comentó.
Con cinco temporadas del primer reality show que esta familia protagoniza bajo la producción de Ryan Seacrest, Kris y su familia aún no están dispuestas a abandonar la TV, donde tienen un promedio de casi dos millones de espectadores por episodio.
“Creo que tenemos una gran base de fans, quienes siempre están al pendiente de nuestra familia, y al mismo tiempo, aquellos que nos ven se pueden encontrar a alguien de nuestra familia con quien identificarse. De alguna forma nos hemos convertido una familia con ellos y creo que es divertido vernos por todo lo que nos ocurre”, afirmó.
Kim va con todo
Kim Kardashian quiere que la tienda de ropa Old Navy deje de usar a una mujer parecida a ella para anunciar sus productos y por ello demandó, el miércoles, a la tienda de ropa y a su matriz, The Gap Inc., en una corte federal de esta ciudad, argumentando que sus comerciales incumplen sus derechos de publicidad por los anuncios que muestran a una mujer que se parece a ella.
El comercial para la TV, con una mujer de pelo oscuro que se parece a Kardashian, ha sido visto más de dos millones de veces en el canal de Old Navy en YouTube.
La demanda de Kim argumenta que los consumidores podrían confundirse por los comerciales y los productos que presenta la modelo. Un comercial titulado Super C-U-T-E comenzó a emitirse en febrero y Old Navy aún emplea algunas de sus promociones, según la demanda.
Ésta también menciona la presencia de la celebridad en otros medios: tiene ocho millones de seguidores en Twitter, más de cinco millones de aficionados en Facebook y es una de las personalidades más buscadas en internet.
Kardashian “ha invertido bastante tiempo, energía, dinero y esfuerzos empresariales para desarrollar sus logros y éxitos profesionales y comerciales, así como para desarrollar su popularidad, fama y notoriedad ante la población”, dice la demanda.
La vocera de Gap, Louise Callagy, explicó que la compañía, con sede en San Francisco, no está al tanto del caso y no tiene declaraciones al respecto.
La querella de Kim pide una compensación no especificada y quiere que un juez federal impida que Old Navy use a la modelo parecida a ella para sus comerciales.
La modelo en los anuncios, Melissa Molinaro, no está contemplada en la demanda, pero expresó su exasperación en Twitter, porque siguen comparándola con Kim, a pesar de que el comercial salió hace cinco meses.
Vida expuesta
Hace cinco años comenzaron los preparativos para realizar el primer reality show de la familia, el cual ya tiene cuatro al aire.
