Houston (EE.UU.), 23 ene (EFE).- El estado de salud del mariscal de campo estelar de los Kansas City Chiefs, Patrick Mahomes, será un factor clave y el centro de atención cuando mañana, domingo, su equipo se enfrente a los Bills de Buffalo, en el partido por el Campeonato de la Conferencia Americana (AFC).
Buffalo se dirige a Kansas City con el único objetivo de conseguir el boleto al Super Bowl LV, después de eliminar a los Baltimore Ravens en el partido divisional de la pasada semana.
Pero también demostrar que el intercambio que hicieron en el sorteo universitario del 2017 con los Chiefs fue el ideal para el futuro del equipo.
Mahomes, que ya confirmó que jugará el partido tras superar el protocolo de conmoción cerebral a que quedó sometido desde el pasado domingo tras recibir un fuerte golpe durante el partido divisional frente a los Cleveland Browns, puedo ser seleccionado por los Chiefs con el número 10 global, en el sorteo universitario del 2017, gracias a que recibieron los derechos de los Bills.
Un intercambio que los seguidores de los Bills han escuchado hasta el cansancio y ahora creen que es el momento de que el equipo se reivindique como ganador ante Mahomes, que en apenas tres años les ha dado ya a los Chiefs un título de Super Bowl.
También, gracias a su labor pudieron aguantar y vencer a los Browns, a pesar de que tuvo que abandonar el campo antes de que finalizase el tercer periodo diagnosticado con síntomas de una posible conmoción cerebral, que le obligaron a irse al vestuario.
Mientras que Buffalo, gracias a todo lo que consiguió con ceder la elección número 10, tres piedras angulares para la franquicia como son el esquinero Tre’Davious White, el apoyador Tremaine Edmunds y el tackle izquierdo Dion Dawkins, además de la estrella de equipos especiales Siran Neal tienen todas las opciones de llegar al Super Bowl.
De hecho, los Bills solo han perdido un partido desde mediados de octubre por 30-32 contra los Cardinals de Arizona, para luego estar impecables.
Abrieron los playoffs con una victoria por 27-24 sobre los Colts de Indianápolis y luego consiguieron una victoria por 17-3 sobre Baltimore para reservar su lugar en el partido por el título de la Americana.
Los 17 puntos de la semana pasada empataron su marca de la segunda menor cantidad de puntos esta temporada. Coincidió con la cantidad total de puntos que tuvieron en la derrota 26-17 ante los Chiefs el pasado 19 de octubre.
Pero su defensa si fue capaz de contener el ataque por tierra de Baltimore y sacar al mariscal de campo Lamar Jackson, actual Jugador Más Valioso (MVP) de la liga, fuera del partido sin hacerles daño.
Su mariscal de campo, Josh Allen, de 24 años, otras de las adquisiciones que los Bills lograron en el 2018, gracias al plan de fichajes que tuvieron en el 2017, ya se encuentra también entre los mejores pasadores de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
Allen completó el 69,2 por ciento de sus pases durante la temporada regular, lanzando 37 touchdowns a 10 interceptaciones.
El corredor Zack Moss estará fuera por la temporada con una lesión en la rodilla, lo que pone toda la carga de trabajo en Devin Singletary, que promedia 4,6 yardas por acarreo en 46 toques de postemporada.
Allen lidera al equipo con 18 acarreos para 57 yardas, mientras que el receptor abierto Stefon Diggs atrapó ocho pases para 106 yardas y un touchdown la semana pasada y también será decisivo.
A pesar que Mahomes ya fue sacado del protocolo de la conmoción cerebral y podrá jugar el domingo en el Arrowhead Stadium, de Kansas City, los aficionados de los Chiefs esperan que llegue al partido del domingo en plenitud de forma, como también lo desean el mundo de las apuestas, que tienen a su equipo de favorito para volver a Super Bowl y defender el título de campeón.
Si Mahones no puede hacerlo, el suplente Chad Henne, un veterano de 11 temporadas, sería el plan B de los Chiefs y un reemplazo de garantía, como ya lo demostró en el partido ante los Browns, que aguantó la presión y ayudó a asegurar el triunfo.
Pero todos dentro del equipo de los Chiefs, encabezados por el entrenador en jefe Andy Reid, están convencidos que Mahomes, de 25 años, volverá al emparrillado para ser decisivo y ganador, ante el equipo que hace cuatro años le cambió su destino profesional. Info, Mi Ciudad Tv