“No quiero que estén retenidos en centros de detención. Esa fue una decisión muy desafortunada y quiero que eso sea revertido”, dijo Clinton en una entrevista con la cadena latina Univision.
Clinton, que puntea las encuestas en el bando demócrata camino a las presidenciales de 2016, prometió asignar más recursos para agilizar la atención de los casos de inmigrantes, que se multiplicaron luego de la oleada de familias y menores indocumentados provenientes de Centroamérica hace un año.
Según la exsenadora y exsecretaria de Estado, se deben nombrar más abogados, activistas y jueces para evaluar las historias personales de los menores, que huyen de la violencia de las pandillas y de la pobreza en sus países.
“Algunos serían enviados de regreso luego de una audiencia justa, pero muchos no”, afirmó.
La detención el año pasado de más de 62.000 menores sin acompañante adulto provenientes de Guatemala, El Salvador y Honduras desató una crisis humanitaria en Estados Unidos.
Muchos centros que no habían previsto el aumento de migrantes se encontraron pronto sobrepasados en sus capacidades aunque el secretario estadounidense de Seguridad Interior, Jeh Johnson, anunció reformas en junio para flexibilizar las condiciones de detención.
A seis meses de las primarias, Clinton dijo sentirse “más relajada” que en 2008, cuando una candidatura casi asegurada le fue arrebatada por el carismático senador y actual presidente Barack Obama.
Durante la entrevista con la cadena líder en español, Clinton defendió también su plan para reducir las deudas de los estudiantes universitarios y una reforma “integral” al sistema migratorio estadounidense.
En claro contraste con los principales aspirantes republicanos, Clinton señaló que una vía a la ciudadanía para los 11 millones de indocumentados “es la única solución”.
El Senado estadounidense apoyó en 2013 una amplia y ambiciosa reforma de todo el sistema migratorio, pero los republicanos que controlan la cámara baja la sepultaron.
¿Cómo lo lograría Clinton? Con más demócratas en el Congreso, que se renueva parcialmente en 2016.
“Si tenemos un margen más pequeño entre republicanos y demócratas y si los latinos se presentan con fuerza en estas elecciones y ponen a los republicanos sobre aviso, creo que lo podemos lograr”, señaló.