Miami, 5 jul (EFE).- El estado de Florida (EE.UU.) apeló este martes una orden del juez floridano John C. Cooper para bloquear temporalmente la entrada en vigor de la nueva ley estatal del aborto, por lo que al menos por ahora el bloqueo no tendrá efecto.
El pasado jueves 30 de junio Cooper aceptó una solicitud de un grupo de organizaciones pro aborto para frenar la entrada en vigor de la llamada ley HB 5, prevista para el 1 de julio, que, entre otras cosas, reduce de 24 a 15 semanas de embarazo el plazo para abortar legalmente en Florida.
Sin embargo, la medida del juez no se aplicó inmediatamente, pues para eso se necesita una orden por escrito, que ha llegado solo media hora antes que la apelación por parte del estado.
Los solicitantes del bloqueo de la ley HB 5 alegaron que la prohibición del aborto en el estado después de las 15 semanas de embarazo viola la constitución estatal porque va en contra del derecho a la intimidad, un argumento reconocido por el juez Cooper en su fallo, que consta de 68 páginas.
La HB 5 establece que para que una mujer pueda interrumpir su embarazo en los dos únicos supuestos contemplados, que son que la vida de la madre corra peligro y que el feto tenga malformaciones, dos médicos deben certificar que es necesario.
Ni la violación ni el incesto se tiene en cuenta en esa ley.
Un portavoz del gobernador de Florida, el conservador Ron DeSantis, impulsor de la ley HB 5, confirmó hoy a los medios que el estado apeló la medida de bloqueo temporal dictada por Cooper, un juez de distrito del condado León, en el norte de Florida.
La ley HB 5, cuyo nombre oficial es el de “Ley de Reducción de la Mortalidad Fetal e Infantil”, fue promulgada en abril pasado y ha desatado una viva polémica que aun no se ha acallado, como demuestran las manifestaciones de protesta realizadas durante el fin de semana pasado en distintos puntos del estado.
Los manifestantes protestaron también por el fallo de la Corte Suprema estadounidense que anula la sentencia conocida como “Roe versus Wade”, que hace 49 años estableció el derecho constitucional al aborto en todo el país.
La decisión histórica del alto tribunal faculta a cada estado a decidir si mantiene o prohíbe este derecho reproductivo.
La Corte Suprema sentenció que la Constitución “no otorga” este derecho y devuelve la autoridad para poder legislar sobre el aborto al “pueblo” y sus “representantes electos”.
Al conocerse la decisión, DeSantis afirmó en un comunicado que el Tribunal Supremo “respondió a las oraciones de millones de estadounidenses”.