La aprobación del plan de gastos marcó el final del periodo legislativo de 2022, en el que el Congreso floridano ha aprobado una batería de leyes ultraconservadoras que impactan en las mujeres, la comunidad LGBTQ+ y los inmigrantes, entre otros, y han sido promovidas o apoyadas por el gobernador, el republicano Ron DeSantis, quien buscará un nuevo mandato en las elecciones de noviembre de este año.
El gobernador todavía puede vetar algunas de las partidas presupuestarias aprobadas por los legisladores, los cuales, según medios locales, han podido ser más generosos en sus previsiones gracias a los casi 3.500 millones de dólares de fondos federales que recibió Florida para aliviar la situación creada por el coronavirus.
Los 112.100 millones de dólares presupuestados significan un 10 % de aumento respecto a los 101.500 millones del anterior presupuesto, según USA Today.
El nuevo presupuesto, que todavía necesita la firma del gobernador, prevé aumentos salariales del 5,38 % para todos los trabajadores estatales y el compromiso de que ninguno de ellos ganará menos de 15 dólares por hora, según detallan medios locales.
También incluye 200 millones en dólares de ayuda federal para complementar la suspensión durante octubre de 2022 del impuesto estatal a la gasolina.
El presupuesto aprobado hoy contempla 12 millones de dólares para reubicar a inmigrantes indocumentados fuera del estado; 10 millones para reactivar la Guardia Estatal de Florida con una fuerza de hasta 400 voluntarios, y 50 millones para un fondo de subvenciones con vistas al crecimiento del empleo.
Con respecto a los defensores públicos y fiscales estatales adjuntos verán un aumento salarial adicional de entre 5.000 y 10.000 dólares anuales.
De aprobarse el nuevo presupuesto, el salario mínimo de los maestros aumentará a por lo menos 47.500 dólares anuales.
“Este presupuesto invierte en los trabajadores que sirven a nuestro estado y a su gente”, dijo el presidente del Senado estatal, el republicano Wilton Simpson, en un comunicado.
En su propuesta del presupuesto estatal de diciembre pasado, DeSantis ya había incluido aumentos salariales para los trabajadores estatales y una pausa de cinco meses en el impuesto a la gasolina, algo que los legisladores finalmente redujeron a un solo mes.
DeSantis señaló que la suspensión del impuesto a la gasolina era necesaria para compensar el aumento de los precios de carburantes y la inflación “por culpa” del presidente Joe Biden, según dijo.
PrensaMexicana