La Historia de Cuba cambio desde 1868. Aquel año, un grupo de nobles cubanos, al mando del Padre de la Patria, Carlos M. de Céspedes, habían iniciado la aventura de la independencia. Pero luego de casi diez años de lucha sin cuartel contra el ejército colonial español, los cubanos habían perdido la confianza en la victoria y para 1878, ya estaban dejando caer el machete de lucha. España poseía una armada en Cuba, que teóricamente era invencible, para aquel Ejercito Libertador, formado por campesinos, antiguos esclavos y algunos hacendados carentes de la más mínima formación militar. Además de eso, los soldados españoles estaban técnicamente mejor equipados que el mambí cubano. Pero si en algo, los cubanos superaban a sus adversarios era sin dudas en valor y entrega por la causa de su Patria. Entonces, ¿por qué el pesimismo y la frustración? Pues ante tan colosal audacia de aquellos harapientos y maltrechos oficiales, se había fomentado de igual manera la desidia y la indisciplina entre los propios hermanos de lucha. Cada cual halaba hacia el bando de su conveniencia, cada quien interponía sus propios intereses, ante el bien común que era la independencia de la nación. Fue así, que el 10 de febrero de 1878, cansados de pelear contra España y contra ellos mismos, cosa que era aún peor, los criollos firmaban la Paz con los españoles, aceptando el ultraje de nuestra libertad a cambio del armisticio. El lugar escogido para el triste Pacto, fue El Zanjón, para dejar constancia ante el mundo, que no por cobardía, sino por insensatez, se puede perder una guerra. Ahora, a poco más de cien años de firmar la Paz sin la garantía libertaria, el pueblo de Cuba vive enfrascado en una lucha de desgaste contra una de las más sangrientas y longevas tiranías de la Historia. Infinidad de hombres y mujeres han asumido el mando de diversos grupos los cuales ya forman parte de una oposición que es reconocida nacional e internacionalmente. Estos nuevos actores sociales se han enfrentado a las huestes criminales del castrismo, han sido ultrajados públicamente, han renunciado a obtener una envidiable posición laboral o a una carrera universitaria para ellos o para sus familiares más cercanos. Ninguno ha sido indigno en sus pronunciamientos contra la maquinaria del régimen, que los hostiga sin piedad. Sin embargo, herederos de la valentía de los mambises del siglo XIX, también recibieron la misma desunión y falta de sensatez que sus inmortales predecesores. Increíblemente, hemos sido testigos de innumerables hechos absurdos, donde los propios opositores le hacen oposición a otros opositores. Recientemente un grupo de las reconocidas “Damas de Blanco” grupo pacifista de resistencia contra la dictadura, irrumpió en casa de otra miembro para realizarle un acto de repudio al más típico estilo del régimen. La victima en este caso, acusada de aparente traición fue una de las fundadoras, la señora Alejandrina García de la Riva, esposa del Preso de Conciencia Diosdado González Marrero, en prisión desde el 2003, cumpliendo una condena de 20 años. En esta oportunidad, las victimarias serían las propias compañeras de lucha. La gran pregunta de todo esto es ¿adónde quiere llegar con esto la oposición cubana? ¿De verdad se pretende derrocar la tiranía de los Castros con semejantes espectáculos? En mi opinión, creo que es imposible. Así de simples, somos los cubanos. Una vez más la sombra de un nuevo Zanjón cae sobre la hoguera de la libertad. La interrogante es, la hará apagar nuevamente?
Cuba: Del Pacto de El Zanjón a la Oposición de los Opositores.- Por: Ignacio L. Prieto
Un grupo de las reconocidas “Damas de Blanco” grupo pacifista de resistencia contra la dictadura, irrumpió en casa de otra miembro para realizarle un acto de repudio al más típico estilo del régimen.