Tokio, 26 jul (EFE).- La Federación Internacional Ecuestre (FEI) y el Comité Organizador de Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio (TOCOG) comenzaron con la puesta en marcha de los protocolos de calor y humedad para “permitir a los atletas equinos y humanos optimizar su desempeño con el clima de Tokio”, informó la FEI.
La monitorización cobra un importancia determinante para la prevención de riesgos en esta modalidad.
En este sentido, el uso de cámaras termográficas durante la actividad de los caballos -que permitirá estimar con precisión desde una distancia de 5 a 10 metros la temperatura corporal del atleta ecuestre- se convierte en una de las herramientas más importantes para la prevención de riesgos del animal y, por tanto, repercute directamente en la seguridad del jinete y la amazona.
La provisión de sombra, carpas y áreas de enfriamiento especiales (incluidos ventiladores de nebulización fría) para atletas y séquito, y la provisión de instalaciones y medidas para funcionarios y voluntarios, son las medidas relacionadas con los deportistas humanos.
Por su parte, las medidas concretas relacionadas con los atletas ecuestres son:
-Establos con aire acondicionado en Baji Koen y Sea Forest Park.
-Entrenamientos y competiciones programados para horas tempranas de la mañana y por tarde (bajo focos).
-Monitorización constante de las condiciones climáticas actuales y pronosticadas, trabajando con la Agencia Meteorológica de Japón.
-Monitorización constante de las condiciones climáticas de las instalaciones con el índice Wet Bulb Globe (WBGT), que mide el estrés por calor en la luz solar directa tomando en cuenta la temperatura, la humedad, la velocidad del viento, el ángulo del sol y la cobertura de nubes (radiación solar) cada 15 minutos.
-Monitorización constante de los caballos por parte de un equipo veterinario de clase mundial, múltiples instalaciones de enfriamiento (tiendas de sombra, ventiladores de nebulización fría, hielo y agua ilimitados, unidades de refrigeración móviles, etc.)
-Protocolos específicos de mitigación climática para entrenamientos, calentamientos y competiciones.
-Monitorización de caballos durante actividad usando cámaras termográficas, permitiendo estimar con precisión desde una distancia de 5 a 10 metros la temperatura corporal del caballo.
Esta monitorización de los caballos con cámaras termográficas permite el seguimiento del caballo sin interferir con los deportistas; ayuda a la identificación temprana de caballos con riesgo potencial de sobrecalentamiento; permite intervenciones oportunas y la posibilidad de detener un caballo en la pista para traer unidades móviles de enfriamiento para proporcionar un enfriamiento rápido.
“La FEI trabaja para minimizar el impacto del calor y la humedad en desempeño desde antes de los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, y el trabajo en Tokio 2020 es una continuación de eso”, declaró el organismo.
El martes por la mañana, con la llegada de la tanda final de atletas equinos de salto ecuestre, los caballos se habrán instalado ya en su casa temporal: el Parque Ecuestre de Baji Koen. Info, Mi Ciudad Tv