El Atlético de Madrid naufragó en su visita al Osasuna, donde sucumbió de forma rotunda por 3-0, lo que permite al Real Madrid liderar la Liga española veinte meses después. La jornada no pudo ser más positiva para el conjunto del italiano Carlo Ancelotti. Ganó al Elche (3-0) y sus dos rivales en la lucha por el campeonato, el Barcelona, y el Atlético, sucumbieron en los campos de la Real Sociedad (3-1) y Osasuna.
El Real Madrid, por lo tanto, encarará el derbi madrileño del próximo domingo en el Vicente Calderón con tres puntos de ventaja sobre rojiblancos y azulgranas. No hace mucho, el equipo de Ancelotti estaba descolgado en la tercera plaza y ahora, gracias a su regularidad en la victoria y a los pinchazos de sus oponentes, manda en la tabla.
El Real Madrid no lideraba la Liga desde el 13 de mayo del 2012, cuando, con el portugués José Mourinho en el banquillo, se coronó campeón tras ganar en la última jornada al Mallorca (4-1) en el Santiago Bernabéu. En la pasada campaña y lo que va de la presente no había ocupado en ningún momento el primer puesto.
El partido que cerraba la sesión dominical de la vigésimo quinta jornada fue una pesadilla para los hombres de Diego Pablo Simeone, que tuvieron un rendimiento irreconocible, sobre todo en la primera parte.
Lo único positivo fue que ninguno de los advertidos de suspensión, entre ellos Diego Costa, vieron cartulina y podrán estar en el derbi. Osasuna, que pelea por encontrar la tranquilidad y no tener problemas clasificatorios, dio un repaso a un rival endeble atrás y sin acierto en ataque.
La situación se le puso en contra al Atlético muy pronto. Un error defensivo facilitó a Álvaro Cejudo el 1-0 (m.6), y otro fue el preludio del golazo que consiguió el argentino Emiliano Armenteros para situar el 2-0.
Intentó el Atlético la reacción, pero no tuvo acierto. Osasuna supo capear y apuntillar el choque antes del descanso con una diana de Roberto Torres ante la pasividad de la zaga del conjunto madrileño.
El que sí logró su objetivo fue el Athletic. Ganó en el campo de un Betis cada vez más hundido en el farolillo rojo (0-2) y afianzó la cuarta plaza y por lo tanto el acceso a la Liga de Campeones, importante tras la victoria de la Real Sociedad contra Barcelona.
El Athletic mantiene los cuatro puntos de ventaja sobre el conjunto donostiarra y siete respecto al Villarreal, que visitará mañana, en el último encuentro de la jornada, al Espanyol del mexicano Javier Aguirre.
La victoria del equipo de Ernesto Valverde no estuvo exenta de polémica. Los béticos, en situación desesperada, reclamaron dos penaltis en el área del Athletic y para colmo luego le pitaron otro que se produjo fuera del área y que aprovechó Iker Muniain para situar el 0-1 (m.34).
Al final, Guillermo Fernández (m.81) firmó el marcador definitivo que consolida la ambición vizcaína y sepulta aún más las esperanzas de salvación de los del argentino Gabriel Humberto Calderón, que perdieron incluso por expulsión al franco polaco Damien Perquis y a Lolo Reyes.
En la lucha por Europa, el Sevilla y el Valencia sacaron adelante sus partidos. Los andaluces en Vallecas contra el Rayo (0-1) con un tanto de Jorge Andújar ‘Coke’, exjugador del equipo madrileño; y los de Juan Antonio Pizzi con un gol en el descuento del portugués Ruben Vezo ante el Granada (2-1).
No jugó bien el Sevilla, pero tras seis partidos ligueros sin ganar, al menos encontró la acción que definió el triunfo, un lanzamiento de falta de
Ivan Rakitic, su mejor hombre, y el remate de Coke, y aunque el Rayo buscó salvar un punto no pudo y se queda a cinco de la salvación.
El Valencia tuvo otro partido difícil contra el Granada, que incluso se adelantó con un tanto de Francisco Medina ‘Piti’ (m.47), pero la fe y la lucha de los de Juan Antonio Pizzi les permitió evitar el tropiezo con los tantos de Paco Alcácer y Vezo (m.91).
Con ambos triunfos, el Valencia y el Sevilla, que comenzaron la temporada con la Liga de Campeones como objetivo y Europa como mal menor, continúan igualados. Ambos suman 35 puntos y son séptimo y octavo. Sin gran juego y con problemas, pero anuncian guerra.
