La vigésima entrega de los Latin GRAMMY le rindió especial tributo al mariachi, con la presentación más emotiva de la noche, donde se unieron las dos voces más grandes del género, Vicente Fernández, y su hijo Alejandro Fernández, junto con Alex Fernández.
Juntas estas tres generaciones conmovieron profundamente a todos los asistentes, en un momento muy especial, donde se demostró que las rancheras juegan un papel crucial en la música latina y se han inscrito en su historia con especial emotividad y cariño, pasando de generación en generación y grabándose en la cultura colectiva.
Padre, hijo y nieto, unieron sus voces para interpretar el clásico “Volver, volver “, el cual fue coreado de pie por los asistentes con especial cariño y nostalgia y en un momento individual, Alejandro Fernández cautivó a la audiencia entonando su más reciente sencillo “Caballero”, que debutó en iTunes en la posición número uno en países como México, Estados Unidos, Guatemala y República Dominicana y se ha convertido en uno de los temas favoritos en países como Colombia, Panamá, Chile, y España.
“Caballero” escala vertiginosamente las listas en Estados Unidos y Latinoamérica, actualmente en el Top 10 de radio en el listado regional mexicano de Billboard, además de ser una de las canciones más escuchadas en Estados Unidos, Top 50 en listado Hot Latin Songs de Billboard.
No hay persona que no recuerde haber visto cantar una ranchera por Vicente Fernández, y hoy, su hijo, Alejandro Fernández, continúa el legado de su padre, poniendo la música mexicana en alto, y deleitándonos con su singular voz, sensualidad y elegancia, que lo han destacado durante su carrera y lo han convertido en un ícono de la música latina y referente de la música mexicana en el mundo.