Washington, 21 mar (EFE).- Cuando se cumplen dos años del establecimiento de polémico Título 42 que ha expulsado de forma expedita a más de 1,6 millones de inmigrantes amparado en una ley sanitaria, activistas marcharon este lunes en Washington contra esta medida considerada “racista” e “”ilegal”.
Con carteles con textos: “Restablecer el asilo, ahora”, “Alto a las deportaciones” y “Bienvenidos con dignidad”, los manifestantes instaron de nuevo al presidente Joe Biden a poner fin al uso de la medida.
El uso de esa norma sanitaria, que autoriza la expulsión expedita de extranjeros que lleguen a la frontera y a quienes se les considere como un riesgo para la salud pública, comenzó durante el gobierno del entonces presidente Donald Trump (2017-2021).
Decenas de organizaciones no gubernamentales, religiosas y de quienes abogan por los inmigrantes se congregaron frente al Hotel Trump, en Washington DC, y marcharon las tres cuadras hasta la Casa Blanca reclamando la cesación del Título 42.
“Desde su inicio el Título 42 ha sido tan ilegal como cruel”, afirmó Neela Chakravartula, del Centro para Estudios de Género y Refugiados.
“La expulsión de quienes buscan asilo enviándolos a sitios donde encaran la persecución o la tortura viola nuestras leyes y obligaciones bajo tratados internacionales”, agregó.
El gobierno de Biden ha continuado usando el Título 42 aunque ha eximido de la expulsión a los inmigrantes menores de edad que llegan a la frontera sin compañía de adultos responsables.
Dos semanas atrás un tribunal federal en Washington DC prohibió que, bajo el Título 42, sean expulsadas las familias a sitios donde puedan sufrir persecución o torturas.
Lee Gelernt, abogado de la Unión de Libertades Civil (ACLU) dijo que “el Título 42 fue un pretexto horrendo del gobierno de Trump para expulsar a personas que buscaban asilo”.
“Dos años más tarde el Título 42 sigue causando daños”, agregó. “Cada tribunal que ha considerado esta política ha dictaminado que es ilegal y no hay justificación para que siga en uso”.
Karla Marison Vargas, abogada del Proyecto de Derechos Civiles de Texas, sostuvo que “el uso del Título 42 jamás ha sido algo relacionado con la salud pública”.
“Ha sido, siempre acerca de mantener a negros, indígenas y mestizos afuera de Estados Unidos”, agregó. “El presidente Biden sabía esto cuando heredó esa política, y sin embargo aquí estamos hoy en el segundo aniversario de esta norma racista y dañina”.
“No hay, y nunca ha habido, una razón de salud pública detrás del Título 42”, recordó por su parte en un comunicado el grupo America’s Voice.
Recordó que mantener esa política viola la ley estadounidense y las promesas del demócrata Biden.
Senadores como los demócratas Bob Menéndez, Chck Schumer, Alex Padilla y Corry Booker han pedido a Biden dejar atrás “esta política inhumana de Trump”.
“No existe una política sólida o una razón de salud pública para mantener el Título 42 en los libros, y seguir fingiendo que existe solo socava la credibilidad de la administración Biden”, expresó Douglas Rivlin, portavoz de America’s Voice.
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