Denver (EE.UU.), 14 jul (EFE).- La figura del estelar japonés Shohei Ohtani brilló más que nunca en la edición 91 del Juego de las Estrellas del béisbol de las Grandes Ligas al liderar al equipo de la Liga Americana al triunfo de 5-2 frente a la Liga Nacional.
Nunca antes una edición del “Clásico de Verano” había tenido a un pelotero que primero fue el abridor desde el montículo y luego también inició como el primero en el orden de bateo.
Todo eso lo protagonizó este martes Ohtani al realizar la doble función como lanzador y bateador, que permitió que el Joven Circuito mantuviese la rutina de ser superior y ganador ante el equipo estelar de la Liga Nacional.
Esta vez, el escenario fue el Coors Field, de Denver, donde la Americana consiguió su octavo triunfo consecutivo y el decimoquinto en los últimos 18 Partidos de las Estrellas que se han disputado.
Detrás de una primera entrada sin anotaciones de la sensación Ohtani, la figura del joven dominicano Vladimir Guerrero Jr., de los Azulejos de Toronto, brilló en el juego ofensivo con el poder de su bate.
Con cuadrangulares de Guerrero Jr., quien reclamó los honores de Jugador Más Valioso (MVP) del Juego de Estrellas, y del receptor Mike Zunino, de los Rays de Tampa Bay, y una jugada defensiva clave del compañero de equipo de Ohtani en los Angelinos de Los Angeles, Jared Walsh, la Americana fue siempre superior a la Nacional, en una perfecta noche de verano frente a 49.184 seguidores que llenaron el Coors Field, en Denver.
Como se esperaba, todo el centro de atención estaba puesto en Ohtani desde el principio.
Recién salido de su emocionante pero infructuoso giro en el Derby de Jonrones, que se celebró el lunes, con triunfo por segunda edición consecutiva de Pete Alonso, de los Mets de Nueva York, Ohtani, de 27 años, abrió el juego como el bateador designado y luego lanzó la parte inferior de la primera entrada.
Un par de roletazos en el plato no se sumarán a la creciente leyenda de Ohtani, pero sí lanzó una entrada 1-2-3 contra los primeros en el orden de la Liga Nacional -el dominicano Fernando Tatis Jr., Max Muncy y Nolan Arenado-. Eso incluyó una bola rápida de cuatro costuras a 165 kilómetros por hora.
Pero a pesar de lo centrado en Ohtani, que fue el período previo a este juego, el partido en sí mostró también a otras estrellas.
Los dos de Toronto, con Marcus Semien y Guerrero Jr., adelantaron a la Liga Americana temprano contra el derecho de los Cerveceros Corbin Burnes.
Semien llegó con un sencillo productor en el segundo, y Guerrero Jr., de 22 años, golpeó y se paró para ver un magnífico disparo en solitario de 143 metros entre el jardín izquierdo y central en el tercer episodio.
Al profundizar tal como lo hizo su padre en el Salón de la Fama en el Juego de Estrellas de 2006, Guerrero Jr. conectó el cuadrangular All-Star más largo desde que Statcast comenzó a rastrear.
También fue el cuadrangular 200 en la larga historia del “Clásico de Verano”, que este año comenzó con polémica cuando fue cambiada su sede original de Atlanta por Denver por la nueva ley electoral que promulgó el estado de Georgia.
Más optimismo de los Azulejos llegó cuando el jardinero dominicano Teoscar Hernández abrió lo que resultó ser una quinta entrada de dos carreras con un doble ante el novato de los Marlins, Trevor Rogers.
La Liga Nacional finalmente subió al tablero con un cuadrangular solitario del receptor J.T. Realmuto, de los Filis de Filadelfia, contra el lanzador dominicano Gregory Soto, de los Tigres de Detroit, que puso el parcial de 4-1 en la parte alta de la misma entrada.
Pero la Liga Americana respondió de regreso con un tiro solitario del receptor de los Rays Zunino al jardín derecho-central ante el derecho de los Mets, Taijuan Walker, en la sexta.
La Liga Nacional tuvo otra anotación en la parte baja de la sexta, pero su mayor amenaza para el dominio de la Liga Americana se extinguió en la octava.
Las bases estaban llenas para Kris Bryant, quien conectó un elevado al izquierdo. Walsh de los Angelinos, quien normalmente es un primera base y nunca había jugado una entrada en el jardín izquierdo en su carrera en las Grandes Ligas, lo atrapó con un agarre deslizante para frustrar la jugada y ser también protagonista.
Al final la victoria se la quedó Ohtani (1-0), que estuvo perfecto con 14 lanzamientos y 10 colocados en la zona del strike, mientras que el relevista Liam Hendriks, de los Medias Blancas, el noveno lanzador utilizado por la Americana consiguió el rescate.
Mientras que la derrota fue para Burnes (0-1), que trabajó dos entradas con cuatro imparables y dos carreras limpias cedidas. Info, Mi Ciudad Tv
Sonia Salazar